Estudiar un idioma en el extranjero es muy diferente a estudiarlo en tu país de residencia. Sin lugar a dudas, puedes estudiar idiomas desde casa, está muy bien, hay mucha gente que lo hace y cada día los métodos son mejores. Sin embargo, aprender un idioma en el extranjero será totalmente diferente y aquí te damos 10 razones.
Inmersión en la lengua
Cuando estás en el extranjero, estás sumergido de lleno en la lengua del país, todo lo que ocurre a tu alrededor está en ese idioma, y quieras o no, vas a acabar asociando un montón de palabras, frases, textos, y demás a tu vida cotidiana.
Desde pedir comida, subir al bus o taxi, reservar una habitación, comprar en el supermercado, localizar una calle, comer con amigos, o incluso abrir una cuenta en el banco… Son situaciones del día a día que te llevarán a vivir una situación de inmersión lingüística continua.
Cuando vas pasando más tiempo en ese país, poco a poco, tendrás mayor fluidez con el idioma, incluso a veces te sorprenderás de las palabras que te salen por sí solas.
Aprender más rápido
Al estar totalmente sumergido en una lengua, vas a aprender mucho más rápido el idioma. Viviendo en el extranjero, y siempre y cuando no tengas amigos que hablen el mismo idioma, te vas a ver obligado a aprender mucho más rápido y no parar de practicar y mejorar tus habilidades lingüísticas.
Puedes aprender más rápido un idioma pasando unas semanas en el extranjero que cuando estás estudiando un idioma en tu país de residencia. ¿Por qué? Porque aprendes a través de la experiencia y eso se queda grabado por más tiempo.
Serás más inteligente
Cuando sueñas en otro idioma, te conviertes en parte de esa cultura. Es una de las señales que tu cerebro emite que significa que estás comprendiendo el idioma que estás aprendiendo.
Esto es algo muy típico en las personas que pasan un tiempo viviendo en el extranjero en un país que se hable un idioma diferente al de su lengua materna.
Pregúntale a cualquier persona que conozcas que haya pasado un tiempo viviendo en el extranjero si le ha ocurrido esto en alguna ocasión.
El aprendizaje del lenguaje afecta las vías neuronales de tu cerebro, cuando aprendes un idioma, tu cerebro, en cierta medida, crece. Aquí tienes un interesante artículo del periódico The Guardian donde se explica todo esto más a fondo.
Hacer nuevos amigos
Al estudiar un idioma en el extranjero vas a hacer nuevos amigos, e incluso… puede que encuentres a tu media naranja. No sería el primer caso.
Tanto si estudias en una escuela de idiomas, como si vas a vivir una temporada al extranjero por tu cuenta, vas a conocer a un montón de personas de los cuales muchos de ellos se convertirán en amistades para toda la vida.
Hay personas de todo el mundo que salen al extranjero para estudiar un idioma, vas a conocer a muchos que están situación que tu y que al final, acabaréis juntos y formado un gran grupo de amigos.
Serás más resolutivo
Estudiar un idioma en el extranjero y vivir una experiencia internacional como esta, te llevará a ser una persona que aprenda a resolver problemas.
Estar en el extranjero, en un lugar que no conoces, con un idioma que no es el tuyo, te llevará a tomar decisiones continuamente para resolver los impedimentos del día a día.
Esto es muy bueno porque vas a obtener y mejorar una habilidad muy importante actualmente de cara a tu currículum, la resolución de problemas, algo que aparece como requisito en la mayoría de las ofertas de empleo.
Viajar al extranjero
Tal vez, después de aprender el idioma, el viaje es una de las razones más llamativas a la hora de estudiar un idioma en el extranjero.
Vas a viajar, y no sólo a la ciudad donde te alojes, podrás recorrer el país, e incluso los países vecinos, y seguramente, acompañado de aquellos amigos nuevos que has conocido.
Acceder a mejores trabajos
Al tener esta experiencia en tu currículum y las habilidades de idiomas que has aprendido en este viaje, tendrás mayores oportunidades de acceder a un mejor empleo.
Saber un idioma es una clave para acceder a un puesto de trabajo. Además, no sólo para acceder aun puesto de empleo en tu lugar natal, sino también poder acceder un gran número de oportunidades para trabajar en el extranjero.
Nuevas aficiones
Hay muchas personas que deciden estudiar idiomas en ciertos destinos por las aficiones a las que pueden acceder en esos lugares. Por ejemplo, Canadá, Tokio, Austria o Francia uno de los destinos favoritos por los aficionados al esquí o el snowboard, Australia o California, para los apasionados del surf, Berlín o Londres, para los aficionados al arte urbano y la cultura…
Deberás hacerte la pregunta de ¿Cuál es tu afición y cuál es el destino mejor para practicarla? Te gusta el surf, el esquí, el snowboard, aficionado al arte urbano, la moda, el trekking, el submarinismo, la mountain bike…
Vivir una experiencia única
Sin lugar a dudas, estudiar un idioma en el extranjero te va a llevar a vivir una experiencia internacional única.
El viaje, los amigos, las excursiones, la gastronomía, la vida urbana, la noche… vayas donde vayas, estarás en un lugar distinto, será una experiencia emocionante y estimulante en todo momento.
Conclusiones sobre aprender un idioma en el extranjero
Como verás, estudiar en el extranjero es fantástico, si tienes la oportunidad de experimentar un viaje de estas características, no lo dejes pasar, será toda una aventura, un antes y un después en tu vida.
Si quieres buscar un escuela para estudiar en el extranjero, puedes echarle un vistazo a los programas que ofrece esta Escuela de Idiomas.
Si prefieres ir por tu cuenta, puedes mirar algunos programas de voluntariado o estas formas para viajar con poco dinero. También puedes acceder a otros recursos para viajar por el mundo.