Los profesionales “multitask” o capaces de hacer multitasking, hoy en día representan un amplio valor agregado para las empresas, especialmente en un panorama laboral cada día más demandante y lleno de necesidades que es necesario cubrir, preferiblemente de manera eficaz y simultánea.
Aunque el multitasking o la capacidad de realizar múltiples tareas al mismo tiempo, es una práctica que en ocasiones ha sido criticada por algunos expertos en materia de productividad e incluso por la ciencia misma, la realidad es que desarrollar la capacidad de enfocarse en una serie de tareas simultáneas, en especial si son fácilmente automatizables, puede presentarse desde la otra cara de la moneda y traer diversas ventajas.
¿Quieres conocer cuáles son las ventajas del multitasking y los profesionales “multitask” que las empresas quieren ver?
A continuación te contaremos un poco más acerca de esta técnica de productividad, así que comencemos.
Qué significa multitasking o multitarea
La palabra multitasking, traducida al español como “multitarea”, hace referencia a la capacidad de llevar a cabo dos o más actividades de forma simultánea, por lo general con la finalidad de ahorrar tiempo, esfuerzos y “resolver más” dentro de un marco de tiempo más corto.
Ventajas de hacer multitasking
Aunque no todas las personas están naturalmente predispuestas a sacar el máximo partido del multitasking, y por ende, prefieren colocar todo su enfoque en una sola tarea, la habilidad de ser multitask cuenta con la posibilidad de ser entrenada a nivel de ejecución para conducir a ventajas como:
Ahorro de tiempo y energía
Con la multitarea, es posible que puedas tachar de tu lista de tareas pendientes varias responsabilidades en un solo bloque de tiempo, lo que te permite ahorrar horas del día y espacio en tu agenda, además de no hacerte desperdiciar energía trabajando por separado en actividades que podrían agruparse dentro de un solo bloque.
Mayor control en entornos de trabajo desorganizados
Ser una persona multitask no es sinónimo de perder el enfoque, de hecho, en general es necesario estar muy enfocado para que esta técnica tenga éxito sin distracciones.
No obstante, en ambientes de trabajo con mucho caos y altos niveles de estrés, siempre viene bien automatizar y ubicar en bloques de trabajo todas las tareas que puedan liberarse de la lista de pendientes de manera fácil por medio del multitasking.
Aumento en la productividad
Cuando trabajas simultáneamente con volúmenes de trabajo que caen dentro de la misma categoría y por ende, pueden realizarse bajo la técnica de la multitarea, obtendrás como ventaja un considerablemente aumento en la productividad y el rendimiento.
Inicio de una jornada más eficiente
Cuando están comenzando una jornada de trabajo, es posible que previamente gastes tiempo y energía en una serie de tareas básicas y rutinarias que en realidad serían fácilmente automatizables a través del multitasking.
¿El multitasking siempre es bueno?
Si bien las ventajas del multitasking son una realidad que muchos profesionales experimentan gratamente, esta técnica no está exenta de caer en múltiples críticas que alegan como la multitarea en realidad puede perjudicar la productividad, afectar la memoria ante la falta de atención sostenida en los detalles más pequeños, aumentar el riesgo de errores y la posibilidad de caer en ciclos del estrés tras enfrentar un volumen de trabajo mucho más amplio.
La realidad es que si el multitasking no es aplicado siguiendo los parámetros correctos, y se abusa de los bloques de multitareas llenandolos de demasiadas actividades, un estudio de la Universidad de Stanford afirma que esta técnica puede resultar contraproducente.
4 consejos para un multitasking efectivo
Es muy difícil ver las ventajas del multitasking sin seguir las tres claves para una gestión eficaz de multitareas que veremos a continuación:
Planifica tus bloques de multitareas
Comenzar a hacer multitasking saltando entre tarea y tarea de manera aleatoria, podría arruinar hasta el más mínimo beneficio de esta práctica, por lo que antes de intentar convertirte en una persona “multitask”, es mucho más importante trabajar en ser una persona planificada, para ello, recuerda agendar cuáles serán las tareas en las que te centraras durante el día y crear una lista en donde resaltes aquellas actividades que pueden ser gestionadas mediante procesos multitasking sin afectar la calidad del resultado final.
Haz multitasking solo con bloques de tareas de la misma naturaleza
Las actividades que tendrás permiso de estar en tu lista o bloque apto para la multitarea, deberán tener alguna similitud o punto en común, de hecho, entre más parecida sea su naturaleza, más efectivo será el multitasking.
Por ejemplo, supongamos que debes trabajar en la redacción de varios artículos y quieres optimizar la cantidad de tiempo que te toma hacer cada uno. Si deseas sacar partido de las ventajas de la multitarea para ser más eficiente, intenta esquematizar todos los artículos en un mismo bloque de tiempo o realizar la investigación para cada uno dentro de la misma jornada.
Haz lo mismo si, por ejemplo, tienes que realizar varias llamadas en un mismo día. Obviamente no podrás estar presente en todas las llamadas a la vez, pero sí reservar tu disponibilidad para atenderlas dentro del mismo bloque de tiempo, lo que consecuentemente te permitirá finalizar con todas las tareas del mismo estilo en un solo espacio.
Utiliza el multitasking solo para las actividades más rutinarias y automáticas
No te compliques utilizando la multitarea en aquellas actividades sobre las que verdaderamente debes poner tu mayor esfuerzo, enfoque y concentración, por ejemplo, jamás se recomendaría hacer multitasking mientras realizas tu proyecto de final de curso o un trabajo importante para algún cliente.
En su lugar, reserva tus capacidades de persona multitask para aquellas actividades que involucran procesos simples, automatizables y si es posible, que ya conoces de memoria bastante bien a raíz de haberlos repetido día tras día.
Por ejemplo, puedes sacar partido de la multitarea haciendo al mismo tiempo tareas del hogar básicas, respondiendo varios correos electrónicos simples y rutinarios, trabajando en una actividad muy repetitiva, etc.
Limita el número de tareas
Por más que consideres que tu capacidad de ser una persona multitareas es sumamente óptima y hasta envidiable, todo merece tener un límite y el multitasking no es la excepción. El éxito de esta técnica en parte depende de no sobrecargarse, por lo que intenta limitar tus bloques para hacer multitasking con dos o tres tareas simultáneas, siempre basándose en su grado de complejidad.
¡Ahora es tu turno!
Cuéntanos tu opinión: ¿Crees que el multitasking es realmente una técnica que puede beneficiar tu productividad? ¿Prefieres centrar toda tu energía y tiempo enfocándote en una sola tarea? ¿Te darías la oportunidad de convertirte en una persona “multitask”?
¡Deja tu respuesta en los comentarios!
